Alegría matinal

Advertencia: el siguiente post puede contener altas dosis de contenidos cursis, a quienes se consideren sensibles a este tipo de discursos les rogamos mantenerse alejados de sus respectivos monitores. Gracias.

Hoy viajé en un transporte público por la mañana, a esa hora en que todo el mundo tiene cara de "quisiera atravesar cualquier otra circunstancia que no fuese esta de aquí y ahora", yo incluida, con mis escasas horas de sueño muy por debajo de la cantidad mínima recomendable, y no precisamente por exceso de rocanrol sino por trámites impostergables y obligaciones varias.
El transporte iba sospechosamente poco lleno para el horario pico y amenizado (¿?) por la melosa música de FM chorreagrasa que el aquí-mando-yo-y-al-que-no-le-gusta-que-se-joda conductor mantenía al recontra palo, para beneplácito de alguna que otra púber que coreaba al son del cuasi megáfono "...estoy muriendo, murieeeeeendo por dentro..he he..", pero apenas en una voz muy bajita, mientras el resto del pasaje conservaba impasible su actitud caracúlica-oficinesca-matinal.
De pronto, ocurrió algo que llenó de colores brillantes el deprimente paisaje de la mañana gris: en la radio comenzó a sonar el tema "suave", de Luis Miguel, y de a poco, muy lentamente, como si se tratara de la magistral escena de la película "The full monty" en la que los protagonistas hacen la cola de un banco y mientras ensayan uno de los números de baile para su show de strippers, todos (y cuando digo "todos" quiero decir TODOS) los pasajeros comenzaron a mover alguna parte de su anatomía (pie que golpea contra asiento de adelante, mano sobre cartera, algún que otro movimiento caderil) y fueron varios los que se animaron a susurrar la letra, tararearla y hasta realizar algún giordanesco movimiento de cabeza, transformando sus avinagrados semblantes en rostros de personas luminosas, que en lugar de transcurrir porque no les queda otra salen a enfrentar la vida para ganarle un nuevo round.
Debo reconocer que Luismi no se encuentra precisamente entre mis preferencias musicales (sé que los entendidos dicen que canta bien, tiene buenos músicos, intepreta a Manzanero, Lepera, etc.), pero a mí no me gusta.
Sin embargo, hoy aportó un significativo granito de arena a mi momento de plena alegría matinal.
Gracias, Luismi.

Lo confieso

Me gustaría ser amiga de Marcelo Polino.
Sí, ¿y qué? ¿Acaso tengo que dar explicaciones sobre lo que escribo en mi blog?
¿Tengo que ser Políticamente Correcta?
¿Qué carajo es ser Políticamente Correcto hoy en día?
¿Hacerle caso a Majul?
¿Votar a Filmus?
De todas formas creo que no me importa, ni qué es ser PC (uiaa) ni cómo suene mi confesión. A mí me gustaría ser amiga de Marcelo Polino y punto.
Y cenar al menos una vez por mes con él.
Y que me cuente chimentos de la farándula tamizados por su avezado colador, que me ponga al día sobre la vida y obra de su otra amiga Alejandra Pradón, que me diga la verdad de la milanesa de la famosa caída, si era cierto que estaba con todo el plantel de no sé qué equipo.
Me gustaría contarle cosas de mi vida y pedirle opinión, preguntarle cosas de la suya.
Tal vez pueda herir algunas sensibilidades con estas palabras, pero sinceramente lo escribo porque lo siento.
Y podría confesarlo anónimamente en esos blogs dedicados a los secretos anónimos, pero prefiero hacerlo acá y dar la cara como dolly.

ÚLTIMO MOMENTO: En su programa nocturno por América, MP le dijo a su admirado Antonio Gasalla, en el marco de una entrevista: "me gustaría llegar a ser tu amigo" (grr, verde de envidia) a lo que el capocómico le respondió "yo no puedo decir lo mismo Polino, (y aquí viene lo importante): NADIE QUIERE SER AMIGO TUYO".

MENTIRA!! YO SÍ QUIERO!! AQUÍ ESTOY, JE-LOU!!!

Artista invitada: Rusa Doll

Inaugurando este nuevo espacio intitulado "El rinconcito de las plumas amigas", Ermitanga Producciones tiene el gusto de presentar un texto rusadolliano de pura cepa.
Ya sabemos que nuestra amiga tuvo un importante conflicto unos meses atrás con cierta mermelada de cierta marca y sabor, que (siempre según nuestra informante) fue retirada de las orientales góndolas sin aviso ni oportunidad de despedida.
Pues bien, ahora la aqueja un problema similar, pero relacionado con cierta clase de galletas, otra vez de un sabor específico.
Como ella en más de una oportunidad ha declarado que por ahora no está en sus planes abrir un blog, luego de arduas conversaciones con las autoridades de Ermitanga se ha decidido brindar un espacio a nuestra soviética corresponsal en el mundo de supermercadismo oriental (con perdón de la rima si no del todo involuntaria, al menos cuasi inevitable) para que exprese sus ideas, quejas y reclamos al respecto.
Bienvenida entonces, Rusa Doll. Y que se repita.

Aclaración: Ermitanga S.A. , si bien confía en la veracidad de los datos expuestos, no se responsabiliza por TODAS las opiniones vertidas más abajo, y destaca especialmente NO estar de acuerdo con la frase "NO A LAS FRUTIGRAN DE SALVADO". Gracias.


Investigación de mercado

Por: Rusa Doll

No doy más. Ahora es otro producto de mi canasta básica el que, de buenas a primeras, sin dar explicaciones, desaparece del horizonte supermercaderil.

Estoy hablando de las galletitas dulces de Granix FRUTIGRAN de avena con pasas de uva. Ahora resulta -que como me ocurriera ataño con la mermelada La Campagnola de Frambuesa BC- las Frutigran vienen en toda la línea (Salvado, Frutas Tropicales) menos la que esta humilde consumidora -valga la redundancia- consume.


¿Qué hacer? ¿Organizar una sentada frete a las bocas de expendio asiáticas, reclamando la urgente reposición de la mercadería en falta hace semanas? ¿Esperar un par de semanas más a ver qué pasa? ¿Irme hasta el coto de Nazca (del cual me separan unas 8 cuadras) con el riesgo de que tampoco haya?

No faltará quién diga, como ocurriera anteriormente, que los productos de mi predilección desaparecen porque soy una consumidora voraz que vacía precozmente las góndolas, que mi modalidad es hasta agotar stock, y todo eso que ya sabemos.

Pues bien, reto a toda nuestra mini comunidad virtual a que vaya a sus respectivos supermercados (asiáticos, en lo posible, pues los gigantes acumulan y tienen reservas; aunque serán bienvenidos otros datos por igual) y aporten información sobre el citado tema.
Me despido con unas proclamas de consumidora maltratada en sus sentimientos más hondos (pues como ya sabemos: con la comida favorita de uno no se jode, loco ¿ok?): -BASTA A LA INCONTINUIDAD SÚBITA DE MIS PRODUCTOS FAVORITOS, QUE ME HACEN MÁS LLEVADERA LA VIDA Y A LOS CUALES ME HE ACOSTUMBRADO COMO UN FUMADOR A SU MARCA DE PUCHOS.
-NO A LAS FRUTIGRAN DE SALVADO
-NO A LAS FRUTIGRAN FRUTAS TROPICALES
-SÍ A LAS FRUTIGRAN DE AVENA Y PASAS

Será Justicia

Nota: Gracias a Ruco, por su colaboración en el envío de la fotografía galletiteril que ilustra este post.

Justicia

Debería implementarse por ley un sistema que dictaminara lo siguiente: a determinada cantidad de tiempo dedicado a las responsabilidades le corresponde obligatoriamente la misma cantidad de tiempo que debe ser destinado necesariamente al ocio improductivo y la contemplación.